Posada romana, tal como pudo ser en el siglo III. Situada en un entorno privilegiado, donde verdes prados se conjuran con robles, castaños y nogales para dibujar un paisaje de ensueño donde se dan la mano dos sierras altivas, la de Béjar y la de Francia, con encantos singulares, donde el aire es tan limpio como el agua.

Situado en plena Ruta de la Plata, cercana a la Sierra de Béjar y su estación de esquí de la Covatilla, el valle del Ambroz, Sierra de Francia, valle del Jerte, Sierra de Gredos y las Batuecas.